sábado, 6 de julio de 2013

Nuevos campeones de gaokao rompen con estereotipos

Huang Yiqing se ha convertido en una celebridad de Internet, no porque logró las más altas calificaciones en el examen de ingreso a la universidad en Wuhan, capital de la provincia de Hubei, sino por lo que escribió más tarde en Renren, una red social china similar a Facebook.

 

Después de enterarse de sus calificaciones del gaokao (examen de ingreso universitario) de este año, Huang escribió el 26 de junio: “He recibido elogios de la gente en toda la ciudad, pero no puedo ganar tu amor”, lo que sugiere que había sido rechazado por la chica a la que quiere.

La confesión divide a los internautas: algunos expresaron su comprensión y le ofrecieron apoyo, mientras que otros se burlaron o lo criticaron. Sin embargo, lo que ha llamado más la atención es la constatación de que los campeones del gaokao ya no son considerados muy inteligentes, sino más bien carentes de emociones o intereses mundanos.

Los expertos en educación dijeron que las escuelas, maestros, padres de familia y toda la sociedad han contribuido a la evolución de estos estudiantes de alto rendimiento.

“A diferencia del pasado, ahora toda la sociedad espera ver a estudiantes más versátiles con distintas personalidades, por lo que los maestros y los padres prestan más atención a su desarrollo integral”, dijo Cai Yanhou, investigador en educación de la Universidad Central del Sur en Changsha, provincia de Hunan.

“Además, los profesores experimentados por lo general tienen una serie de métodos eficaces, lo que ayuda a los estudiantes a dominar una gran cantidad de conocimiento en poco tiempo y obtener altos puntajes en los exámenes”, agregó Cai. “Así que los estudiantes tienen tiempo para las aficiones y otras actividades extracurriculares”, concluyó.

Huang es un ejemplo de ello.

Graduado de la Escuela de Lenguas Extranjeras de Wuhan este año, Huang obtuvo una puntuación de 682 de un total de 750. A pesar de que obtuvo buenos resultados, dijo que no es un estudiante diligente y nunca antes había quedado en el primer puesto en un examen.

“Aprendo rápido y sólo estudio eficientemente en la escuela”, dijo. “Después de la escuela tenía mi tiempo libre, y jugaba al baloncesto con compañeros y amigos o escuchaba música, veía películas o jugaba a juegos de vídeo en casa.

“Si hay un secreto de mi éxito, creo que es mi buena actitud, por la cual tengo que agradecerles a mis padres, ya que rara vez me presionaron”.

Huang dijo que su escuela había animado a los estudiantes a desarrollar aficiones y habilidades, organizar asociaciones y actividades estudiantiles. Participó tanto en grupos de música, como de protección del medio ambiente, actividades que lo ayudaron a estudiar, según piensa él mismo.

Para los estudiantes de hace una década, era otra historia.

Chen Lili, una ex campeona del examen de ingreso de la región autónoma de Guangxi de la etnia zhuang, en el 2006, recuerda la dificultad que tenía entonces, diciendo que era muy trabajadora, aprovechando al máximo cada minuto para estudiar. Así eran sus compañeros de clase.

“Entonces nos levantábamos a las seis en punto de la mañana y estudiábamos hasta las diez y media de la noche”, recordó Chen. “Aparte de algo de tiempo para hacer ejercicio físico, todo nuestro tiempo durante el tercer año de la escuela secundaria se dedicaba a la preparación del examen de ingreso y no teníamos mucho tiempo para desarrollar nuestras aficiones”, agregó.

Chen, que ahora trabaja para una compañía nacional de valores muy conocida, dijo que está contenta de ver a más campeones, pero también dijo que los estudiantes de distintas épocas pueden tener diferentes métodos para estudiar.

“No me arrepiento de los denodados esfuerzos que hice”, dijo Chen, “después de todo, fue el trabajo duro en esos años que me llevaron hasta aquí”.

Wang Sunyu, profesor y especialista en educación de la Universidad de Tsinghua, dijo que gracias a un enfoque en la educación de calidad en los últimos años, en la actualidad hay más campeones que están plenamente desarrollados, tanto en la inteligencia como en otras habilidades para la vida, en lugar de estudiantes que son sólo buenos para aprobar exámenes.

“La educación de calidad, así como el desarrollo integral es bueno para un estudiante”, dijo, explicando que las aficiones pueden tener un efecto positivo en el estudio. “Por ejemplo, las formas en que la gente se inspira por la música y por las matemáticas son iguales, por lo tanto, los estudiantes que tocan el piano a menudo pueden encontrar que no son malos para las matemáticas.

“Además, los estudiantes que disfrutan de la lectura de filosofía o literatura por lo general tienen una comprensión más profunda de la humanidad, lo que no sólo les permite escribir artículos reflexivos, sino también es bueno para su desarrollo”, agregó.

Tang Shengchang, de 71 años, ex director de la prestigiosa Escuela Superior de Shanghái, dijo que muchas escuelas chinas han alentado el desarrollo personal de los estudiantes durante más de 10 años y los efectos se han observado en los últimos años.

“Hemos sido testigos de una serie de campeones del examen de ingreso que son versátiles, es decir son buenos tanto para estudiar como para jugar, en los últimos años”, dijo.

“Pero el número de estos campeones es muy alto este año, lo que indica que la educación de calidad en las escuelas secundarias de nuestro país está pasando por un cambio cualitativo”, añadió.

 

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